"Un caos controlado" es el título de la entrevista a Nazanim Armanian, realizada por Enric Llopis, que aparece en el número de abril de la revista El Viejo Topo (puede verse también en la red). Armaniam es una politóloga iraní, residente en España tras su exilio en 1983, especialidada en relaciones internacionales y, sobre todo, en Oriente Medio y Oriente Próximo*. Es profesora de la UNED, es autora de varios libros y escribe habitualmente en Público en su propia columna "Punto y seguido".
Y es precisamente por su colaboración en este diario digital por lo que conozco sus posicionamientos sobre la geoestrategia de esas regiones del planeta, la intervención de las principales potencias y los con conflictos que se derivan. Unos puntos de vista que, siendo muy crudos, no dejan de ser rigurosos en su planteamiento y razonamiento, a la vez que rotundos a la hora de señalar el papel que juega el imperialismo estadounidense, su principal aliado en la zona, Israel, y otros dos aliados, las potencias regionales Arabia Saudí y Turquía.
La lectura de la entrevista a lo largo de las cinco páginas que ocupa nos permite entender mejor los distintos conflictos existentes, desde el más lejano en el tiempo y en el espacio, como es el de Afganistán, hasta el más cercano de Siria. No se olvida de Irak, Libia o Yemen. De este último país, que está sufriendo una cruenta agresión por parte de Arabia Saudí con la ayuda estadounidense, dice: "la guerra es incluso más cruda que la de Siria, lo que ocurre es que no se trata de un conflicto televisivo. Tienen la guerra muy en secreto".
Sobre Afganistán es muy clara cuando asevera que EEUU no abandonará ese país, pese al tiempo que lleva interviniendo en él y los fracasos militares que sigue cosechando. Considera que es el país de mayor importancia estratégica en la zona, dada la centralidad geográfica en relación a Rusia, China, India e Irán. Eso explica, por ejemplo, la existencia de nueve bases militares.
Tampoco se olvida del conflicto kurdo, su complejidad derivada del reparto de su población entre cuatro países (Turquía, Irak, Siria, e Irán) y las contradicciones que contiene tanto entre los propios grupos kurdos como por sus relaciones con las distintas potencias. Esto le lleva a mostrarse muy escéptica a la hora de vislumbrar un estado kurdo unificado y a apostar por una conferencia de paz en la zona.
La última parte de la entrevista la ocupa el análisis de los grupos yihaidistas y su presencia en Irak y Siria, principalmente, o Libia. Para Armanian "el Estado Islámico nace en Afganistán con el apoyo directo de la CIA y el Pentágono, Arabia Saudí y Pakistán" creado para luchar contra la Unión Soviética, el régimen progresista instalado en Afganistán desde 1979 y las distintas fuerzas progresistas de la zona. Triunfante en la guerra contra la URSS, sus acciones se han ido desplazando hacia otros países con el objetivo de "destruir estados vertebrados y convertirlos en 'fallidos'". Eso ha llevado a que sus componentes adopten denominaciones diferentes (Al Qaeda, Al Nusra, ISIS...), dando la sensación de que se trata de grupos diferentes y complejos, cuando, según dice, no dejan de ser "un grupo de mercenarios, de unas 2.000 personas". Gozan, eso sí, de la financiación de Arabia Saudí y las monarquías del golfo Pérsico, la protección de Turquía e Israel, y "están controlados por Estados Unidos".
Y es que la estrategia imperial, con la ayuda de la OTAN y de Israel es clara: "que se maten unos a otros". Lo que denomina como "caos controlado" no es otra cosa que tener a la región en una permanente situación de pequeñas guerras, pues "cuanto más larga sea la guerra, mejor".
*A lo largo de la entrevista se denomina como Oriente Medio lo que en realidad es Oriente Próximo, salvo las alusiones que se hacen a Afganistán, que sí pertenece al primero.