¿Por qué mataron a Víctor
Jara? Era una persona comprometida política y socialmente. Como militante del
Partido Comunista estaba expuesto a ser una víctima de la represión. Como cantante
destacó por sus denuncias de injusticias. Gozaba de una gran popularidad, lo que
podía haber sido motivo de que, al menos, se hubiera actuado con él con mayor discreción.
De Pablo Neruda, que era una celebridad internacional, hay indicios
consistentes de que lo mataron sutilmente en la clínica donde fue ingresado al
poco del golpe. Sorprende, sin embargo, la saña con la que actuaron con Víctor
Jara. Al poco del golpe se corrió la voz de una frase pronunciada por uno de
los oficiales después de ser torturado: “¡Canta ahora si puedes, hijo de puta!”.
Joan Jara ha mencionado en varias ocasiones que fue el apodado “El Príncipe”,
de nombre real Edwin Dimter Bianchi.
Hay una canción de Víctor Jara, “Manifiesto”,
donde parece que hace una premonición de lo que fatalmente le ocurrió. En ella
empieza diciendo que el hecho de cantar tiene una explicación fuera de la banalidad
o de sus méritos, lo que resulta coherente con el carácter de su militancia y compromiso:
Yo no canto por cantar
ni por tener buena voz,
canto porque la guitarra
tiene sentido y razón.
canto porque la guitarra
tiene sentido y razón.
Más adelante, deja claro cuál era el sentido de sus canciones y a
quiénes iban destinadas:
Que no es guitarra de ricos
ni cosa que se parezca.
Mi canto es de los andamios
para alcanzar las estrellas,
que el canto tiene sentido
cuando palpita en las venas
del que morirá cantando
las verdades verdaderas,
no las lisonjas fugaces
ni las famas extranjeras
sino el canto de una lonja
hasta el fondo de la tierra.
Versos nítidos. Y cuatro de ellos premonitorios: “el
canto tiene sentido / cuando palpita en las venas / del que morirá cantando / las
verdades verdaderas”.
¿Por qué, pues? Está claro que la violencia del
fascismo no fue casual. Por eso actuó con la contundencia que se sabe. Él fue
una víctima más, quizás víctima desgraciada de las “ganas que le tenían” los
portadores de la muerte.