1. Se dice que no ha habido garantías, cuando lo que ha ocurrido en realidad es impedir que se hiciera la consulta.
2. No se le ha conferido valor jurídico, pero se está instando a que se actúe judicialmente desde distintas instancias para encontrar responsables, lo que supone de hecho reconocerle ese valor.
3. Existen dudas en medios judiciales a la hora de tomar iniciativas, posiblemente por el temor que al final recaiga sobre ellos una responsabilidad que no le pertenece, sino al gobierno.
4. Por parte de quienes se han opuesto no se reconocen los resultados, pero no dejan de hacerse cábalas sobre el número de participantes o de quienes han votado en una dirección u otra, e incluso comparaciones con otras votaciones.
5. El número de participantes (cercano a 2,3 millones) no es despreciable, pero, independientemente de los condicionantes, podía haber sido mayor y sospecho que algunos grupos esperaban que así fuera.
6. Es cierto que la prohibición del acto ha echado a mucha gente atrás y por distintas razones: miedo, creerla inútil en esas circunstancias o -para el caso de quienes se oponían- el simple rechazo.
7. Los datos de participación, de algo por encima de la tercera parte, no deben ser tomados como valores absolutos: en Cataluña no ha habido en los últimos una elevada participación en las distintas convocatorias, que en este caso se ha visto condicionada por la postura mantenida por el gobierno central y los órganos judiciales, y el boicot de quienes no han querido participar.
8. Como ejemplo no estaría de más que quienes dudan de la participación habida aplicaran ese baremo a las últimas elecciones estadounidenses, con una participación del 38%, algo que, además, suele ser práctica frecuente.
9. Falta por conocer la radiografía de las votaciones: dónde hubo más participación y dónde menos; cómo se repartió cada opción (SÍ-SÍ, SÍ-NO, NO...); cómo se ha comportado el electorado de cada partido; cómo han sido las variables de sexo, edad, tamaño de población, nivel de estudios... ; sólo así se pueden establecer comparaciones con otras convocatorias.
11. Creo también que han sido las fuerzas independentistas -tanto ERC como la Asamblea Nacional Catalana y Omnium Cultural- las que se han llevado cierta decepción, aun cuando por ahora intenten disimularla: un mayor número de participantes les hubiera dado mayor autoridad, de manera que posiblemente hayan perdido por ahora la iniciativa del proceso.
12. ¿Por qué lo anterior? Porque tanto CDC como UDC, como representantes de la burguesía catalana, buscaban un nuevo marco de relaciones con el estado, basado esta vez en un pacto fiscal, lo que tuvieron que aparcar ante la marea de movilizaciones ciudadanas en favor de la autodeterminación; Mas y CDC se sumaron a ellas sin problemas y UDC mantiene, en distinto grado reticencias, siempre en contra de la independencia.
13. El movimiento independentista, donde actúa ERC, ha sido quien ha llevado hasta ahora la iniciativa del proceso soberanista, pero los resultados del domingo le han mostrado ciertos límites, lo que le ha obligado, de entrada, a pedir unas elecciones inmediatas, a la espera de poder reconducir la situación.
14. Se está dando ahora un pulso/tanteo entre los grupos nacionalistas por lo inmediato: Mas prefiere una lista unitaria para las próximas elecciones, mientras que ERC la rechaza, a la vez que quiere cierto distanciamiento, como puede ocurrir con la votación de los presupuestos.
15. Sospecho que en caso de unas próximas elecciones por separado CDC, todavía con UDC, podría recuperar parte de su electorado, mientras que ERC lo perdería, no así las CUP, que se nutre de un electorado diferente.
16. El PSC, situado en una especie de tierra de nadie y muy lastrado por el PSOE, sigue inmerso en una grave crisis, con un goteo en la salida de dirigentes y militantes, y la pérdida de apoyos electorales.
17. ICV-EUiA están pagando también un coste político por su posicionamiento favorable al proceso soberanista, pero mantiene la coherencia de aplicar sus planteamientos doctrinales en ese campo.
18. La relativa pasividad de Podemos en el proceso y la votación del domingo obedece, de un lado, a contradicciones en su seno, donde conviven partidarios teóricos del derecho de autodeterminación, que lo amplían a otros aspectos, y opuestos, como es el caso de Carlos Jiménez Villarejo; y de otro, a su estrategia política-electoral de no involucrarse donde puede sacar rédito.
19. Lo que parece seguro es que va a irrumpir en el mapa político a costa del espacio de la izquierda no independentista, esto es, el PSC e ICV-EUiA, además de recoger votos de quienes han tendido a la abstención o han votado nulo y en blanco; en suma, sectores políticos disconformes o insensibles al soberanismo por distintas razones.
20. En el seno de las fuerzas opuestas al proceso es posible que se consolide la recomposición del voto, de pérdida en el PP y ascenso de C's, que seguirá beneficiándose del trasvase de votos desde el PSC y recogerá votos del PP; pero les resultará difícil subir en votos.
21. Existe un fuerte malestar en los sectores más conservadores del PP y de los medios de comunicación del conjunto del estado, que acusan al gobierno de cobardía y pasividad.