¿La ha armado Felipe González? ¿Queriendo? ¿O sin querer queriendo, como le gustaba decir al personaje televisivo mexicano "el chavo del ocho"? Anoche empecé a ver en La Sexta la entrevista que le hizo Ana Pastor en "El Objetivo". Acabé yéndome, aunque me perdí lo mejor. O lo peor, según se mire. Por la trascendencia de la noticia, está ocupando hoy los titulares de los medios. Por su contenido -sin extrañarme-, puede ser el anuncio de algo de gran calado político.
En fin, ¿qué es lo que dijo el expresidente del gobierno? Pues nada menos habló de la posibilidad de un gobierno de concentración entre el PSOE y el PP "si el país lo necesita". Una coletilla que aporta una apariencia de prudencia a algo de lo que se lleva hablando desde hace varios meses. No es la primera vez que González se ha referido a ello, si bien de forma más sibilina. También José Bono lo ha hecho. En algunos medios hay analistas que han escrito sobre ello. Durante esta campaña electoral Miguel Arias Cañete está más que insinuando un acuerdo entre los dos partidos. Al fin y al cabo lo están haciendo ya en las instituciones de la Unión Europea, marcando las directrices políticas y económicas, y repartiéndose los diversos puestos de responsabilidad. La propia IU está haciendo hincapié en esta campaña electoral en las enormes coincidencias de PP y PSOE en los asuntos económicos principales, de manera que han votado juntos en las dos cámaras parlamentarias -creo recordar- en las tres cuartas de las ocasiones.
Sin olvidar la intención última de González -ya tiene un antecedente, y repetido, en Alemania y sabe cómo se actúa en el seno de la UE-, ignoro por qué soltó ayer lo de la gran coalición. Me refiero a la oportunidad, teniendo en cuenta cuál es la estrategia electoral del PSOE. Esto es, la de desmarcarse del PP, en busca del electorado de izquierda y hurgando en IU. La pseudomoción de censura en Extremadura es una prueba. Las continuas referencias de Rubalcaba al voto útil, otra. También el lenguaje radical de Elena Valenciano en los mítines y ruedas de prensa. Y añado: la actuación de Susana Díaz hace unas semanas frente a la consejera de Vivienda. La misma Valenciano tuvo que salir de inmediato ayer a tapar el fuego, rechazando las declaraciones de su antiguo jefe y reafirmándose.
"Si el país lo necesita". Todo un aviso para navegantes.