Los carteles electorales con la figura del líder andaluz del PP se han posado sobre un mural por la paz pintado hace 9 años, en plenas movilizaciones -mundiales- contra la guerra de Iraq. Hasta ayer podía verse una reproducción del cuadro de Picasso "La guerra de Corea", acompañado de unos versos de Miguel Hernández, esos de "Tristes guerras...". Así lo consideraron en su día en el Colectivo Educador@s en barrio Arrabal, que actúa desde hace años en un barrio popular de Jerez. Sobre sus actividades, nada mejor que averiguarlo en el enlace antes marcado. Sobre el estropicio y su autoría, nada mejor que leer el comunicado sacado a la luz ayer por la noche. Las huestes de la Andalucía negra han dejado su marca. Las mismas que quieren, más todavía, aposentarse con sus blasones en la tierra que tanto castigaron durante siglos. Ojalá que mañana no ocurra. Que, en palabras de Alberti, ese pueblo "serio, puro y desgarrado / en las tierras de la luz" las ponga freno y abra un camino de esperanza.