Hace un año salió la noticia de la implicación de Javier López Madrid en los casos de corrupción relacionados con la empresa constructora OHL y con Bankia (ver en este cuaderno la entrada "'Compi yogui' y las amistades peligrosas"). Por ese motivo salieron a relucir también los mensajes que intercambió con la reina Letizia, en los que ésta soltó aquello del "compi yogui". He dicho la reina, sí, amiga del susodicho, como lo es también su esposo, el rey.
Hoy López Madrid ha sido detenido y está declarando ante el juez. Tiene que ver con el entramado empresarial-delictivo donde Ignacio González está involucrado. Cosas de comisiones y mordidas para llevárselo crudo (él mismo y quienes sean) y, claro está, para financiar a su partido. Una de las sociedades de ese entramado es OHL, donde el susodicho es consejero delegado. Su presidente es Miguel Villar Mir, suegro para más señas, miembro del Opus Dei, ministro que fue con la dictadura (siendo jefe de gobierno Arias Navarro y ya rey Juan Carlos I de Borbón), directivo durante un tiempo del Real Madrid y aspirante fracasado a la presidencia (¿qué tendrá ese club para que atraiga tanto a gente como él, Florentino y demás?), etc.
Y en esos estamos, ahora le toca el "compi yogui", el de las amistades peligrosas. ¡Qué alegría! Por ahora.