sábado, 29 de octubre de 2022

Eros, entre la sensualidad serena de Afrodita y la sexualidad insaciable de Pan


Entre las obras del periodo helenístico conservadas en el Museo Arqueológico de Atenas hay un grupo escultórico que me llamó la atención: "Afrodita, Eros y Pan", que se corresponden con las figuras romanas de Venus, Cupido y Fauno. Hechas en mármol y con una estatura natural, s
e considera que proceden de Delos, la más central de las islas del Egeo y, según la mitología, el lugar de nacimiento de Apolo. El grupo está datado en el año -150, en los momentos finales del helenismo y a las puertas de la dominación definitiva del mundo griego por Roma. En la escena se representa a la diosa de belleza y del amor saliendo del baño y siendo acosada por el dios de los bosques, mientras Eros se interpone entre ambos personajes. Una confrontación entre la sensualidad contenida de Afrodita, que sostiene en su mano derecha una sandalia y con la izquierda intenta ocultar su desnudez, y la sexualidad insaciable de Pan. Eros, por su parte, reposa una de sus manos sobre la espalda de su madre, quizás protegiéndola, a la vez que con la otra toca uno de los cuernos de Pan. Como se corresponde con el periodo artístico en que se hicieron las esculturas, el naturalismo está presente, alejado de los semblantes serenos propios del periodo clásico. Incluso el tratamiento del tema puede interpretarse desde la ambigüedad, como puede verse en las suaves sonrisas de Afrodita y Eros, y en la posibilidad de que el último esté jugando con uno de los cuernos de Pan.