Traficantes de la información es un libro que molesta. Pone al descubierto el entramado político-financiero de los principales grupos de información españoles, cada vez más concentrados y con una presencia en aumento de grupos foráneos, principalmente italianos y estadounidenses. Un entramado de grupos empresariales multimedia que tiene una gran complicidad con el poder político, una fuerte ligazón con la banca y una creciente interconexión entre los propios grupos mediante empresas de servicios o participaciones accionariales comunes. No falta una de las mayores preocupaciones del autor: la gran opacidad para permitir conocer quiénes son realmente. Tampoco las desregulación laboral de las personas que trabajan en esas empresas, desde periodistas hasta técnicos, y las elevadas cantidades que cobran una minoría de periodistas, exorbitantes cuando se trata de quienes las dirigen.
Prologado por Enrique Bustamante, un pionero en el conocimiento de todo este mundo y experto en el tema, a lo largo del libro es posible informarse minuciosamente de los principales grupos de información españoles, sus verdaderos dueños, los personajes más relevantes, los orígenes de las empresas y la fortunas, las conexiones con los gobiernos, las trampas de todo tipo, las manipulaciones más relevantes y hasta las miserias de sus protagonistas.