El artista Tato Cort es un excelente retratista. He podido ver bastantes de los que ha hecho en sus exposiciones por Barbate y, más concretamente, en lo que es su lugar favorito para hacerlas: el café-bar La Galería. El otro día recibí su llamada para comunicarme de su nueva presencia en Barbate, esta vez con nueve retratos de personajes famosos del mundo de la pintura, la música y hasta la política con el título "Y desde el caos surgieron las miradas". En las paredes del café-bar pueden contemplarse estos días los rostros de Malevich, Prokofief, Mahler, Fidel Castro, Giacometti, Miró, Lennon, Bernarda de Utrera y Paco de Lucía. Sus miradas atraen, si es que no atrapan, no sólo a quienes buscan las pinturas, sino a quienes pasan por allí. Como anécdota, al principio de la inauguración buscábamos a Camarón de la Isla, cuyo nombre e imagen aparecen entre los diez del separapáginas de la exposición, a lo que Tato nos contestó con un "no he hecho todos los deberes".
Hace tres años participó en una exposición colectiva en Arroyo de la Miel, Málaga, donde expuso su retrato de Picasso, luego visto en Barbate, al cual me referí en este cuaderno ("Tato Cort, Picasso y Matisse") para ayudar a comprender la relación existente entre sus intenciones y su concreción plástica. Meses antes había realizado otro, dedicado al amigo común y también artista Luis Valverde Luna, con motivo con el homenaje que le dedicamos tras su fallecimiento. De éste, magnífico, tengo el privilegio de poderlo contemplar casi a diario en los meses de curso, pues está expuesto de una forma permanente en el salón de actos del instituto Trafalgar.
No me canso de repetir el buen hacer de este artista, del que tengo la suerte
de conocerlo en lo personal desde hace un montón de años y, por supuesto, de disfrutar de algunas de sus obras en mi propia casa, lo que no es poco.
Pasar estos días por La Galería, en el Paseo Marítimo de Barbate, es una forma de ver y disfrutar de arte del bueno. En este caso, frente a las miradas de quienes no tuvieron más remedio que posar ante Tato Cort.
(Retratos que aparecen en las fotografías: primera, "Malevich" y Prokofief"; segunda, "Mahler", "Castro", "Giacometti" y "Miró")