lunes, 9 de julio de 2018

Nicaragua, sumando y siguiendo con el debate


Continúo aportando información que nos puede ayudar a entender mejor lo que está ocurriendo en Nicaragua. Son muchas las aristas del problema. Las divergencias resultan evidentes e incluso sorprendentes.  En esta ocasión a través del pensador portugués Boaventura de Sousa Santos, con su artículo "Las venas abiertas de Nicaragua", y de Faustino Torrez, que lo hace en nombre de la Asociación de Trabajador@s del Campo de Nicaragua como el informe "La situación de Nicaragua”.

De Sousa Santos, que hace uso en el título de su artículo de la obra más conocida de Eduardo Galeano, traza un panorama muy crítico hacia el actual gobierno nicaragüense y, de una manera especial, contra el presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo. Veamos algunos de sus argumentos:  

"La oposición al orteguismo cubre todo el espectro político y, tal como ha ocurrido en otros países (Venezuela y Brasil), solo muestra unidad para derribar el régimen, pero no para crear una alternativa democrática. Todo lleva a creer que no habrá solución pacífica sin la renuncia de la pareja presidencial Ortega-Murillo y la convocatoria de elecciones anticipadas libres y transparentes.

Los demócratas en general, y las fuerzas políticas de izquierda en particular, tienen razones para estar perplejos. Pero tienen sobre todo el deber de reexaminar las opciones recientes de gobiernos considerados de izquierda en muchos países del continente y de cuestionar su silencio ante tanto atropello de ideales políticos durante tanto tiempo. Por esta razón, este texto no deja de ser, en parte, una autocrítica".

A continuación se extiende en su análisis mediante la exposición de tres lecciones, que serían: "Primera lección: espontaneidad y organización" (...). "Segunda lección: los límites del pragmatismo político y de las alianzas con la derecha" (...). "Tercera lección: autoritarismo político, corrupción y "desdemocratización".

Por otro lado, Faustino Torrez se posiciona a favor del gobierno, aun cuando no le faltan algunas críticas. He entresacado varios párrafos que ilustran claramente el sentido del informe que firma con su nombre:

"Llevamos diez años observando una oposición atacando al gobierno sandinista, sin reconocer los logros y el avance que logro el gobierno hasta abril del 2018, todos políticos de derecha y resentidos/as han promovido por debajo de la alfombra una constante vitalización hasta llegar a un golpe de estado con la etiqueta #SOS NICARAGUA, para bajar del gobierno a Daniel Ortega y subirse ellos/as, el caso es que hasta antiguos ex funcionarios Sandinistas, defienden este proceso creado por Gene Sharp un profesional contratado por la Central de Inteligencia Americana (CIA), para desarrollar un sutil golpe de estado, “no violento” (...).

Las noticias internacionales informan que congresistas de los Estados Unidos entregan recursos a los llamados “auto convocados”, se eleva la imagen del estudiante y al final observas a un tipo que no es estudiante; sino un delincuente marero con armas de guerra cobrando, secuestrando en las carreteras, destruyen instituciones del gobierno y por supuesto cuenta con el respaldo de algunos obispos de la iglesia católica, partidos políticos y el Movimiento Renovador Sandinista y algunos resentidos/as, aquí el manual deja de ser “golpe blando”, y se criminaliza, aquí se equivocan con Gene Sharp, cuando dice que “la Violencia ya no es efectiva” (...).

No tratamos de bendecir el gobierno del Comandante Daniel Ortega, sabemos que cometió errores, pero no era necesario destruir la economía del país, activar la delincuencia, acelerar el crecimiento del narcotráfico, quema de instituciones públicas, persecución y odio hacia los que Sandinistas que trabajan para el gobierno, destrucción de calles y carreteras y el desprestigio internacional del país, quien ya había construido una estabilidad social independientemente que concentrara mucho poder y no abriera espacios para viejos y actuales políticos del imperio, ahora debemos incluir al M19 de jóvenes auto convocados (...)".