miércoles, 16 de enero de 2013

Cerrando el círculo

Se lo llevan con mayor o menor disimulo. Mediante formas propias de una especie de ingeniería delictivo-financiera: cobro de comisiones, tráfico de influencias, paraísos fiscales, evasión fiscal, apropiación indebida, blanqueo de dinero, alzamiento de bienes, prevaricación... Si por un casual tienen que comparecer ante la justicia, echan mano de la ingeniería judicial que tienen a su disposición para retrasar los procesos, eludir la cárcel, prescribir los delitos, forzar errores, salir impunes... El dinero siempre está presente: para pagar los costes de la maquinaria, las fianzas, los sobornos... Dinero que sale de lo que se han llevado previamente con mayor o menor disimulo. Y no pasa nada.