sábado, 4 de noviembre de 2017

De cobardías (a propósito de lo dicho por González sobre Puigdemont)

Felipe González ha declarado en una entrevista concedida a El País y otros medios sobre la estancia de Carles Puigdemont en Bruselas que le "parece un acto de cobardía, casi de vodevil". No voy a ahora a profundizar en una interpretación sobre dicha estancia, que, independientemente de si puede ser errónea o no, considero propia de una estrategia política acordada por quienes componen el govern catalán. Pero sí me voy a referir a la calificación hecha por el que fue secretario general del PSOE entre 1974 y 1997, recordando un hecho ocurrido el 23 de febrero de 1981. ¿Qué hizo cuando el hemiciclo del Congreso fue ocupado por guardias civiles, metralletas en mano, dirigidos por el teniente coronel Antonio Tejero Molina, pistola en mano? ¿Fue lo suyo y lo de la mayor parte de sus señorías -salvo Adolfo Suárez, Manuel Gutiérrez Mellado y Santiago Carrillo- un acto de cobardía cuando se escondieron bajo las mesas? Por cierto, una acción, la del asalto al Congreso, que en su día no fue considerada como de rebelión por el Tribunal Supremo. ¡Uauuuhhh!