martes, 22 de mayo de 2012

Los largos fines de semana del jefe de algunos magistrados

Se llama Carlos Dívar. Preside el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo. Fue denunciado por un vocal de dicho Consejo por malversación de caudales públicos. Concretamente por haber viajado en varias ocasiones a Marbella durante fines de semana, hospedándose en hoteles de lujo de Puerto Banús y no privándose de comer en restaurantes de ese nivel. Inicialmente el magistrado denunciante se refirió a seis viajes durante 2010 y 2011, que, siguiendo los datos aportado por el diario El País, tuvieron un coste de 5.658,99 euros, con el añadido de otros 26.741,86 euros de gastos relacionados con escoltas y demás. Posteriormente amplió la denuncia, de manera que desde 2008 fueron 20 los viajes que hizo a la misma localidad marbellí, cuyo montante total ascendió a 18.654 euros (más de tres millones), esta vez sin contar el gasto de acompañantes. Fines de semana que oscilaban entre jueves y martes, y viernes y domingo, incluyendo siempre, por supuesto, sábado y domingo. No está mal la cosa. Quizás por un amor desenfrenado al trabajo, sacrificando los fines de semana. O quizás para hacer honor a los cargos que ostenta. Resulta curioso que esa persona dejara de pasar al Consejo las facturas correspondientes desde noviembre del año pasado precisamente cuando el que acabó siendo denunciante empezó a indagar sobre ellas. Pues bien, ayer el fiscal correspondiente del Tribunal Supremo, con la aquiescencia del Fiscal del Reino, ha decidido archivar la denuncia, porque considera que no ha habido ánimo de lucro. Punto. ¿Punto final?