sábado, 28 de septiembre de 2013

¿Qué ha pasado en las elecciones alemanas?

¿Qué ha pasado en Alemania? ¿Ha ganado la derecha? ¿Ha barrido la CDU/CSU? ¿Es Angela Merkel una líder indiscutible? ¿Sólo ha ganado la coalición democristiana? ¿Ha sido derrotada la izquierda? ¿Lo es el SPD? ¿Lo es el partido de Alianza 90/Los Verdes? ¿Ha fracasado La Izquierda? Voy a intentar responder a las preguntas.

La derecha política

Resulta innegable que la CDU/CSU ha sido la gran triunfadora el pasado domingo. El 41,5% de los votos lo demuestra, habiendo ganado en todos los lander, menos en dos, y en casi todas las circunscripciones electorales. Ha subido casi 8 puntos sobre las elecciones de 2009, dejando a su aliado natural de las tres últimas décadas, el FDP, sin representación parlamentaria. El partido liberal ha perdido el 10% de los votos, lo que explica en gran medida la subida democristiana. Hay que tener también en cuenta la salida a la escena política de un nuevo grupo, la AfD (Alianza por Alemania), conservador y euroescéptico a la vez, que ha estado a punto de llegar al 5% exigido para acceder al parlamento federal. Estos tres grupos suman el 51% de los votos, a los que habría que unir los de otros menores, como el neonazi NPD (1,3%). Pese a ello, la representación parlamentaria de la derecha ha quedado limitada, pues la CDU/CSU no ha podido obtener la mayoría absoluta. 

Los grupos de izquierda

El SPD ha obtenido el 25,7% de los votos, habiendo subido 2,5 puntos sobre 2009. Es la primera fuerza en Bremen y Hamburgo, y ha conseguido el triunfo en varias circunscripciones del centro, oeste y Berlín. En todo caso se trata de unos resultados pobres y de una mejoría bastante limitada: ha subido moderadamente en casi todos los lander, pero ha descendido en los orientales.    

Alianza 90/Los Verdes ha tenido resultados peores que en 2009: su 8,4% ha supuesto la pérdida de 2,3 puntos en todo el país y, en distinto grado, en cada uno de los lander. Sólo ha triunfado en una circunscripción de Berlín. 

Die Linke (La Izquierda) se ha quedado con el 8,7%, bajando 3,6 puntos. Las pérdidas han sido desiguales por lander, siendo mayores donde obtuvieron los mejores resultados en 2009. Ha conseguido el triunfo en cuatro circunscripciones, situadas en Berlín este. 

La suma de estos tres grupos es del 43%, dos puntos menos que en 2009. Si añadiéramos al Partido Pirata, alcanzaría el 45%, por lo que se puede decir que el panorama de la izquierda se mantiene en los mismos niveles de hace cuatro años, aunque haya habido cierta recomposición en favor del SPD y los piratas, y en detrimento de Los Verdes y La Izquierda.   

Los apoyos territoriales

La CDU/CSU ha ganado en todos los lander, con excepción de Bremen y Hamburgo. Los principales bastiones los tiene en el sur, que son, a su vez, los de mayor renta: Baviera (49,3%), donde actúa la CSU, y Baden-Wurtenberg (45,7%). Los peores resultados lo ha obtenido en Hamburgo (32,2%), Bremen (29,3%) y Berlín (28,5%). En este último caso, no obstante, tiene apoyos desiguales, siendo muy altos en los distritos occidentales y bajos en los orientales.

En el caso del SPD sus mejores resultados los ha tenido en los lander del oeste, centro y norte. Destaca Bremen (35,7%), donde además ha subido 5,4 puntos. Los otros son Hamburgo (32,4%), Baja Sajonia (33,1%), Renania-Westfalia (31,9%), Schleswig-Holstein (31,6%) y Sarre (31%). Ha triunfado también en varias circunscripciones también de los estados del oeste, centro y norte, junto a otras del este (Brandeburgo y Berlín). Los peores resultados los ha obtenido en el este, donde en la mayor parte de los casos no ha llegado al 20%, y en los dos lander más ricos, Baviera y Baden-Wurtenberg, donde ha alcanzado alrededor del 20%. 

Alianza 90/Los Verdes ha obtenido sus mejores resultados en Berlín (12,3%), en uno de cuyos distritos ha ganado y obtenido un escaño directo; Baden-Wurtenberg (11%), si bien muy por debajo de su presencia en el land, cuyo presidente pertenece a este partido; Bremen (12,1%) y Hamburgo (12,6%).

Die Linke es un partido claramente anclado en lo que fue la RDA, donde mantiene resultados por encima del 20%: Brandeburgo (22,4%), Meckelburgo-Pomerania (21,5%)Sajonia-Anhalt (23,9%) y Turingia (23,4). En el caso de la capital, pese a haber obtenido globalmente un 18,5%, conserva elevados apoyos en los distritos del este, en torno al 40%, base de sus cuatro escaños directos. Donde ha perdido más votos ha sido en los distritos donde obtuvo más en 2009: del este, Brandeburgo (-6), Meckelburgo-Pomerania (-7,5), Sajonia (-4,5), Sajonia-Anhalt (-8,5) y Turingia (-5,4); y del oesteBremen (-4,2) y, sobre todo, Sarre (-11), el land de donde es originario Oskar Lafontaine, uno de los fundadores del partido y anterior dirigente del SPD.

Algo más sobre las elecciones: los apoyos sociales

La revista Der Spiegel ha ofrecido en días pasados los resultados de una encuesta que son altamente reveladores de la realidad social alemana y su traslación al ámbito político. 

Si nos referimos al sexo, la CDU/CSU obtiene más apoyos entre las mujeres que entre los varones. Concretamente lo recibe del 44% de las primeras y del 39% de los segundos. Salvo Alianza 90/Los Verdes, con mayores apoyos en las mujeres, en los otros grupos los apoyos se inclinan ligeramente en favor de los varones. 

Por grupos de edad, la CDU/CSU ha ganado en todos, aunque se reproduce una constante común en otros países del mismo contexto: los apoyos a los grupos conservadores aumentan con la edad, llegando en este vaso a obtener el 50% de las personas con 60 ó más años. En el resto de los grupos hay cierta homogeneidad en relación a los resultados totales, si bien llama la atención el escaso apoyo que obtiene Alianza 90/Los Verdes en el grupo de 60 ó más años, con sólo el 4%.

La tercera variable aportada es la socioeconómica, que es donde se produce una mayor dispersión en los apoyos, a la vez que se detecta con claridad el carácter de cada partido. La CDU/CSU es la primera fuerza en todos los grupos sociales señalados, excepto el de las personas desempleadas, donde sólo es apoyado por un 24%. En el estrato de personas con un empleo no cualificado, pese tener mayores apoyos que el resto de grupos (36%), lo hace con 5,5 puntos por debajo de su media. Mayores apoyos obtiene entre las personas con un empleo cualificado (40%), pero también por debajo de su media. Donde los apoyos resultan claros es entre profesionales y cuadros técnicos (45%), empresariado (49%) y pensionistas (50%), esto último congruente con el apoyo de personas de más edad. 

El SPD tiende a tener sus apoyos en la línea de su media, con la excepción del empresariado (14%), donde prácticamente se reducen a la mitad. En el caso de las personas en paro, es el partido con mayores apoyos (26%), pese a estar ligeramente por debajo de su media.

Alianza 90/Los Verdes es el grupo en el que mejor se refleja el nivel de estudios y/o formación del electorado, aunque esta variable no se ha ofrecido en la encuesta de Der Spiegel. Esto se deriva de los mayores apoyos que consigue entre la gente con un empleo cualificado (11%), profesionales y cuadros técnicos (12%) y empresariado (11%). Por el contrario, en la mitad de su media se sitúan las personas con un empleo no cualificado y pensionistas (4%).     

Die Linke también tiene apoyos desiguales. Son mayores entre la gente en paro (23%) y la que tiene un empleo no cualificado (12%). Están en su media quienes tienen un empleo cualificado y pensionistas. Y tienen menos apoyos entre profesionales y cuadros técnicos (4%) y empresariado (6%).

Por último, en el liberal FPD se refleja claramente que es en el empresariado donde tiene sus principales preferencias políticas, donde alcanza el 10%. 

Las cábalas sobre el futuro gobierno

La ausencia de una mayoría parlamentaria de la CDU/CSU supone en parte un contratiempo y refleja que su triunfo tiene limitaciones. De hecho existe la posibilidad teórica de un gobierno tripartito de los grupos de izquierda, que tienen la mayoría parlamentaria. Pero la realidad política es otra. En el SPD han dejado clara una cosa: que no gobernarán con Die Linke. Hay, además, un antecedente de gobierno de gran coalición entre CDU/CSU y SPD: el periodo 2005-09, con Merkel de canciller y el actual candidato socialdemócrata derrotado, Peer Steinbrück, como ministro de Finanzas. Y, ante todo, existen las grandes semejanzas en numerosos puntos de sus respectivos programas. No podemos olvidar que fue durante los gobiernos de coalición del SPD y Alianza 90/Los Verdes, habidos entre 1998 y 2005 y presididos por Gerhard Schröder, cuando se sentaron las bases de la política económica que caracteriza actualmente el modelo alemán. 

Una breve lectura de los resultados 

El voto del domingo refleja un estado de opinión acorde con el contexto de una Alemania que hegemoniza la política europea. Libre, por ahora, de los rigores de la crisis económica que sufre la mayor parte de los países de la UE, especialmente del sur y este, la población se ha volcado por los partidos que mejor mantienen esa situación. En primer lugar la coalición CDU/CSU, que se ha beneficiado del desvío de votos desde el FDP e incluso del SPD. En el caso del partido liberal, su no presencia en el parlamento resulta un contratiempo, al haber restado potenciales apoyos a Angela Merkel. 

El caso del SPD es paradigmático del rumbo que ha tomado la socialdemocracia europea desde hace varias décadas: su apuesta por el modelo neoliberal. La subida moderada que ha tenido lo ha hecho a costa de Die Linke y Alianza 90/Los Verdes, pero parece claro que en el electorado alemán ha habido una preferencia por apoyar a la CDU/CSU, el grupo que mejor conjuga la opción neoliberal, la presencia internacional de Alemania en el escenario europeo y el conservadurismo social. Los resultados en Baviera y Baden-Wurtenberg, cercanos al 50%, lo simbolizan claramente. 

Die Linke, por último, ha bajado sobre 2009, pero parece haber cortado el descenso que venía sufriendo en las elecciones regionales, consecuencia de su crisis interna. Además de su carácter regional, con una importante presencia en el este, parece que sus apoyos provienen de los sectores que se encuentran en peores condiciones sociales. Y es que, como ya escribí en otra ocasión, "En Alemania también hay clases sociales".