Sus autores han creado una narración que funde la realidad y la ficción, basándose en la memoria contenida en una fotografía hecha en 1937 por José Reymundo González. Para ello se hace uso de un personaje real, María "la Ratona", la mujer que aparece recuadrada en la ventana de la choza/caseta del primer plano, y cuyas palabras (en la voz de Yolanda Marín) nos transportan a ese momento de la historia, en plena Guerra Civil.
A lo largo de casi 20 minutos de duración van apareciendo las personas retratadas y que se ha logrado identificar con la ayuda de quienes vivieron allí. De esa manera vamos descubriendo cómo se fue conformando la barriada por las personas que llegaban a Barbate desde otros lugares: cercanos, como Vejer y Conil; o lejanos, como Almería y hasta Portugal. También, los trabajos que realizaban sus gentes: los hombres, en la mar, en el marisqueo o en el menudeo en el monte; las mujeres, en las fábricas de conservas o en la limpieza de las casas propias y ajenas; las niñas mayores, ayudando a sus madres; y los niños, iniciándose en un oficio. Se puede percibir el eco reciente de la represión llevada a cabo en el pueblo: en forma de asesinatos, como los de los hermanos Carito, el alcalde pedáneo, Javier Tato, o el maestro de Zahara, Manuel Abel Romero; y de detenciones, de las que nos recuerdan la de Miguel, vecino de la barriada. Y hasta se trasluce la dignidad que se desprendía en esas gentes de su actitud ante la vida, pese a su miseria material y la marginación social que sufrían.
La proyección contó con una gran afluencia de público, que llenó el anfiteatro del parque de la localidad. No puedo por menos que felicitar a los autores el trabajo realizado y, así mismo, mostrar mi agradecimiento por haberme nombrado entre sus colaboradores.