viernes, 14 de abril de 2017

Siguen si retirar el medallón del príncipe del fascismo en la Plaza Mayor de Salamanca

Hace tres meses le dediqué una entrada en este cuaderno al medallón que tiene Franco en la Plaza Mayor de Salamanca ("Franco y el medallón de la discordia"). Hoy me he dado un paseo por la maravillosa plaza castellana y he ido a comprobar si todavía seguía allí. Confiaba en que ya lo hubieran retirado, pero ahí seguía, limpio, muy limpio, como si le hubiesen sacado brillo. Está visto que a quienes corresponde hacerlo, tan amantes del imperio de la ley, como les gusta presumir, hacen la vista gorda a todo lo que huela a Franco y su régimen. Les importa un bledo cumplir la ley, como tampoco les importa todo lo que esté relacionado con la etapa más oscura de nuestra historia de los últimos siglos. En bastantes ocasiones incluso se dedican a trivializarla cuando no a ensalzarla. Mientras tanto, la imagen del príncipe del fascismo español, a quien le gustaba que le llamaran Caudillo, sigue donde fue situada tiempo ha para contemplación de la gente.