viernes, 29 de julio de 2011

Una fecha casual

Vaya fecha que ha escogido el de la ceja: el 20 de noviembre. Me imagino que, echados los cálculos correspondientes con el debido asesoramiento, por casualidad. Como posiblemente lo fuera la muerte de Franco cuando murió ese mismo día de 1975, 39 años después que lo hiciera José Antonio Primo de Rivera. ¿O no fue casualidad esa fecha, haciéndola coincidir su entorno con la de “el Ausente”? Qué más da de todas formas. Por lo que se atisba, a ver si va a ser también un día de luto para el pesoe, si es que Rubalcaba no lo remedia. Lo malo de todo esto es que si gana el pesoe, más de lo mismo de los últimos años; y si lo hace el pepé, lo mismo y más. Sigo echando de menos más rebeldía política y social, la suficiente para evitar que ni uno ni otro, ni los correspondientes de uno y otro en algunas comunidades autónomas, puedan seguir gobernando al servicio de quienes controlan los mercados. Más rebeldía social, mucha más, para que el 20-N no sea el día del luto y la nostalgia para recalcitrantes. A ver qué pasa. O mejor, qué hace la gente.