sábado, 11 de enero de 2025

Casas Viejas: 92 años después


Hoy, 11 de enero, he estado en Casas Viejas. Ese mismo día de hace 92 años se inició una rebelión campesina. Con unos resultados catastróficos. Entre ese día y el siguiente murieron 29 personas: 3 fueron guardias civiles; 4, víctimas colaterales; 9, campesinos y familiares quemados en una choza; y 13, también campesinos, consecuencia  de las razias que ordenó el capitán Rojas. Hubo una rebelión campesina, sí. Hubo  antes de iniciarseentre quienes la llevaron a cabo, un exceso de confianza de que podían instaurar el comunismo libertario. Soñaban un mundo mejor ¿Una locura? Veamos, como escribí en octubre pasado, cuál era la realidad para poder entender su desesperación:

"la propiedad de la tierra; los sopacas, migrantes de los pueblos colindantes malagueños que al principio buscaban temporalmente trabajo y acabaron asentándose en Casas Viejas; la miseria de una inmensa mayoría y la explotación humana…; la vieja aristocracia, con el ducado de Medina Sidonia, la familia Pardo Figueroa, el marquesado de Negrón…; los nuevos terratenientes surgidos en el siglo XIX a la sombra de las desamortizaciones, como las familias Vela y Espina".

Miseria, sí. Injusticia flagrante. Y una masacre contra la población campesina.