domingo, 14 de julio de 2024

Gaza ante la historia, de Enzo Traverso: un alegato contra el genocidio de un pueblo


El historiador Enzo Traverso nos acaba de ofrecer su último libro: 
Gaza ante la historia (Madrid, Akal, 2024). Lo ha escrito al calor del contexto generado por el  acontecimiento ocurrido el 7 de octubre pasado, tras el que se ha desencadenado una sucesión de horrores que, por ahora, no están teniendo límites. Como explica el propio autor en el Prefacio, la base se encuentra en un artículo suyo escrito y publicado en diciembre en Il Manifesto, cuya amplia difusión le ha llevado a ampliarlo. A lo largo de poco más de un centenar de páginas y 8 capítulos pone al descubierto el trasfondo profundo de lo ocurrido ese día de octubre, en que varios comandos de la rama armada de Hamás perpetraron una acción en la que fallecieron más de 1.000 personas. 

Un trasfondo que hunde sus raíces en décadas de ocupación del territorio palestino por el Estado de Israel, y las consiguientes limpieza étnica, destrucción material de viviendas e infraestructuras, violación sistemática de los derechos humanos, violación de los acuerdos internacionales... Y desde ese octubre ha surgido un nuevo capítulo, de los más sanguinarios, de la guerra atroz en la que se enfrentan dos fuerzas muy desiguales: un ejército, el Tzahal, altamente moderno y sostenido principalmente por EEUU, pero también por las potencias occidentales; y un grupo armado que, aprovechando cualquier resquicio, intenta debilitar a su enemigo. Y en medio, el pueblo palestino, víctima del saqueo territorial y una violencia extrema que no tiene otro objetivo que su expulsión, cuando no su desaparición.   

Estamos ante un libro que, no por breve, deja de ser intenso y estar falto de rigor. Una síntesis y unas reflexiones de lo que se ha ido escribiendo que ayudan a entender la dimensión de un problema que viene de lejos, de dos milenios de antisemitismo, pero que desde finales del siglo XIX se ha ido trasmutando en la disputa  entre el sionismo y el antisionismo, cuyas consecuencias, después de lo que estamos viendo, están removiendo las conciencias de mucha gente. Y es que las víctimas de ayer se han ido convirtiendo en los verdugos de hoy.

He aquí algunos de los pasajes, consciente que lo mejor es leer el libro:    

"la destrucción de Gaza es el epílogo de un largo de opresión y desarraigo" (p. 17).

"el 15 de octubre de 2023, 800 académicos de diferentes disciplinas, desde  el Derecho Internacional hasta los 'Genocide  and Holocaust Studies', dieron la voz de alarma sobre el riesgo de genocidio en Gaza (...). Para Raz Segal, catedrático [de la Universidad de Nueva Jersey], 'Gaza constituye un caso de genocidio de manual', valoración que comparte Dirk Moses, uno de los estudiosos más autorizados del tema. La intención de aniquilar Gaza en su conjunto también estaba implícita en la declaración de Netanyahu del 28 de octubre, que, mediante una referencia bíblica, evocaba la implacable lucha de los judíos contra los amalecitas" (pp. 20-21).

"miles de niños han sido asesinados por bombardeos programados mediante algoritmos de inteligencia artificial" (p. 30).

"la 'razón de Estado' refiere a validar a un conjunto de acciones ilegales e inmorales que constituyen una especie de cara oculta de la ley" (p. 46).

"[Alemania] marca un giro xenófobo en la política interior, convirtiendo la lucha contra el antisemitismo en un arma para disciplinar y meter en cintura a los inmigrantes y a las minorías identificadas con el islam" (p. 49).

"los mitos antisemitas más antiguos parecían haberse reactivado de repente para volverse contra los palestinos. (...) muchos periódicos que suelen considerarse serios, publicaron informaciones falsas sobre mujeres embarazadas destripadas, decenas de niños decapitados y bebés arrojados a hornos por combatientes de Hamás (...). Esas invenciones puestas en circulación por el ejército israelí fueron inmediatamente aceptadas como pruebas (...) para ser abandonadas o desmentidas en voz baja unas semanas más tarde" (p. 54-55)".

"Los antisemitas de ayer son hoy los que más denuncian el antisionismo como una forma de antisemitismo" (p. 63).

"La violencia palestina tiene la fuerza de la desesperación" (p. 74).

"Hamás se fortaleció tras el fracaso de los Acuerdos de Oslo [de 1993]. En 2000 la segunda Intifada le dio un nuevo vigor. (...) Ha  condenado el Holocausto y el antisemitismo, declarando que su lucha no es contra los judíos sino contra el Estado sionista. En sus nuevos estatutos de 2017 abandonó el plan de destruir Israel y adoptó la idea de un Estado palestino dentro de las fronteras de 1967, es decir, Cisjordania, Gaza y Jerusalem Este" (pp. 74-75).

"sus selfies y la fotos obscenas que cuelgan [los soldados del Tzahal] en las redes (...) recuerdan tristemente a las fotos que se hacían los soldados de la Wehrmacht en Polonia y Bielorrusia, en las que sonreían junto a partisanos ahorcados" (p. 96).

"Tras la anexión de Jerusalem Este, a donde se han trasladado al menos 200.000 colonos, el asentamiento de otros 500.000 en Cisjordania y la destrucción de Gaza, la hipótesis de dos Estados se ha vuelto objetivamente imposible. Es más, el Gobierno de Israel no quiere dos Estados; quiere anexionarse Cisjordania y llevar a cabo una limpieza étnica en Gaza" (p. 99).

"muchos de los protagonistas de este conflicto no ven otra salida que la de un Estado binacional en el que israelíes y palestinos, judíos, musulmanes y cristianos puedan convivir en pie de igualdad. Hoy, esta opción parece irrealizable, pero, si pensamos a largo plazo, parece la única lógica y coherente" (p. 103).

"Lo que está en juego hoy no es la existencia de Israel, sino la supervivencia del pueblo palestino" (p. 109).