viernes, 24 de febrero de 2017

Olé, por Iñaki y Cristina

Primero absuelven a la mujer. Al marido, condenado a siete años de cárcel, le rebajan la pena solicitada inicialmente por la fiscalía. Ya ahora, a la espera de que el Tribunal Supremo resuelva el recurso sobre la sentencia, se ha decidido como medida cautelar que no ingrese en prisión, no teniendo que presentarse periódicamente en el juzgado y sin ver retirado su pasaporte. Mientras tanto, el matrimonio sigue viviendo felizmente en Suiza, con sendos empleos bien remunerados - gracias el enchufe de papá, claro- y unos gastos de seguridad que salen de las arcas del estado. ¿Qué han robado, estafado o se escaqueado a costa del dinero común? ¡Qué importa! Para eso está la estirpe, la condición, la sangre...   Mejor, imposible. ¡Olé!