viernes, 1 de marzo de 2019

Con Catarina Eufémia "la búsqueda de la justicia continúa"

Hace unos años, en una de mis visitas a las tierras del Alentejo, me quedé con las ganas de visitar Baleizao, una pequeña freguesia del municipio de Beja. En aquella ocasión no pudo ser, pero hace un par de días aproveché el viaje para acercarme y cumplir mi deseo. En ese pueblo se mantiene muy viva la memoria de una humilde segadora, Catarina Eufémia, víctima de la represión de la dictadura salazarista. En 1954, con apenas 26 años, recibió a bocajarro varios disparos de fusil. Había sido elegida como una de las peticionarias que debían negociar un aumento de los jornales. Pero ni en su entierro la dejaron tranquila. Las autoridades hicieron todo lo posible para que su cuerpo no fuese acompañado por quienes la querían y hasta llegó a ser enterrada en una localidad vecina. Militante comunista, se convirtió desde el primer momento en símbolo de la resistencia al fascismo. Su memoria sigue perdurando  en el tiempo. En  Baleizao y en tantos otros pueblos o ciudades portuguesas está presente en monumentos y calles. También, en poemas y en alguna canción, como la que José Afonso musicó sobre un poema de Vicente Campinas. Todo eso a una humilde mujer, segadora, analfabeta y madre de tres hijos. A una mujer valiente, capaz de jugarse la vida para mejorar las condiciones de vida de su gente, de su clase. Y es que, como acabó Sophia de Mello su poema, "la búsqueda de la justicia continúa".